Hoy, 15 de septiembre, se recuerda la muerte de nuestro prócer. El coronel José Manuel Baca, “Cañoto”, nació en Santa Cruz de la Sierra el 10 de diciembre de 1790.
Fue protagonista de los levantamientos de Membiray y de Santa Cruz de la Sierra, en setiembre de 1810. El año 1813 se alistó en el Ejército de Warnes y fue héroe de las batallas de Florida (1814) y El Pari (1816), en el cuerpo de Cazadores de Caballería. Algunos historiadores afirman que estuvo en la batalla de Santa Bárbara, combatiendo en el batallón de los Pardos.
Después del holocausto del Pari, realizó acciones de Resistencia bajo el mando del entonces coronel José Manuel Mercado. En 1821 fue a combatir con las fuerzas de Martín Miguel de Güemes, quien le ratificó su grado de Capitán, participando del denominado “Día Grande de Jujuy”.
A la muerte de Güemes, Cañoto retornó a su tierra natal y organizó una Guerrilla con un pelotón compuesto por héroes del Pari, hostigando al régimen realista hasta 1825. Participó de la toma definitiva de Santa Cruz, el 14 de febrero de 1825, que declaró la independencia de la corona.
En todas estas acciones de resistencia contó el apoyo de su esposa, Doña Florita Mendoza, quien con uniforme militar y carabina en mano le acompañaba.
El 12 de julio de 1825 fue nombrado Administrador del pueblo de San José de Chiquitos, con lo que los nuevos mandantes lo apartaron de los acontecimientos políticos de su ciudad natal, sin apoyo alguno. Sin embargo su corta gestión en Chiquitos fue ejemplar.
Tiempo después, decepcionado de todo y amargado, se retiró a vivir a un pequeño rancho que adquirió trabajosamente en Jitapaqui. El 15 de setiembre de 1854 murió el prócer del pueblo en aquel lugar, cerca de donde Warnes estableció un cuartel de Caballería en aquellos tiempos.
Como fue soldado de línea, antes que guerrillero, el 28 de octubre del año 2003, el Estado boliviano le reconoció el grado póstumo de Coronel, a solicitud de la Sociedad de Estudios Geográficos e Históricos de Santa Cruz.
